Es un venado cósmico, un sobreviviente de las lanzas del tiempo, de los tentáculos ligosos de la muerte, solo el viajero maya entiende mis ansias de silencio, es silencio, es vibración, yo me hago silencio y me hago tierra. No muestra tristeza conforme me voy muriendo aunque me acompañó una vida, los mocos se los ha limpiado y viendo las estrellas se prepara para abandonar el vértice. Y partir de nuevo. |